
Mañana se celebra el 80 aniversario de la proclamación de la II República española, una de las más avanzadas de su época, truncada por una de las fuerzas más reaccionarias de esa época y de todas. Es un buen día para reivindicar la abolición de la monarquía que degrada nuestra condición de ciudadanos a la condición de súbditos.